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SULIDIZA Y LA GIMNÁSTICA ARANDINA. AÑO: 1948
El documento que tenemos el placer de publicar en portada se corresponde con el carné de socio de la Gimnástica Arandina del impresor, escritor y fundador de Cartelera Arandina Luis Díaz Meléndez (1906-2001), más conocido por su seudónimo literario Sulidiza. Fechado en Aranda de Duero el 1 de julio de 1948 y rubricado por su propietario, el documento da fe de que, en la citada fecha, Sulidiza se convirtió en el socio protector número 41 del equipo de fútbol de Aranda, cuyo nombre completo en aquel entonces era “Gimnástica
Arandina de Educación y Descanso”. La Gimnástica Arandina inició su andadura como equipo federado en mayo de 1948, momento en que el club fue reconstruido a partir de la antigua Sociedad Deportiva Gimnástica Arandina. En aquel entonces, la sede del club se ubicaba en la céntrica plaza del comandante Requejo y la presidencia de la primera Junta Directiva estuvo a cargo de Juan José Fernández Castro. En su año inaugural, el club contaba con el apoyo y el reconocimiento de 450 socios, siendo Sulidiza uno de ellos. Desde temprana edad, Sulidiza se interesó por documentar las tradiciones y la historia de Aranda. Aunque no era antropólogo, desarrolló un método de trabajo que bien podría acreditarle como tal. Utilizando su cámara fotográfica, una grabadora y su bloc de notas, Sulidiza logró capturar la esencia de la vida popular arandina. Sus primeros trabajos fueron artículos de costumbres que publicó en El Eco de Aranda (1926-1936), un pequeño periódico local que se imprimía en la imprenta de su padre, Pedro Díaz Bayo. Posteriormente colaboraría en La voz de Castilla, de la que fue corresponsal, así como en Aranda Semanal y Diario de Burgos. Fruto de su labor, publicó varios libros, entre los que cabe destacar Estampas Arandinas (1995). También escribió guiones para programas de radio, realizó dos películas documentales y recopiló el auténtico cancionero arandino en cintas de audio. A estos detalles sobre la biografía y la obra de Sulidiza cabe añadir el de ser uno de los primeros socios de la Gimnástica Arandina. Y así como nuestro equipo de fútbol local ha dejado una huella en la memoria de varias generaciones de arandinos, la obra de Sulidiza y su legado constituye una valiosa contribución a la preservación de la riqueza cultural e histórica de Aranda de Duero.
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