Imagen Nº708
Foto 10 Junio 2013. Procesión de San Antonio de Padua. Hacia 1950.
Sabido es que la religión ha jugado un papel decisivo en la vida de los pueblos. Si miramos a España, vemos como la religión católica ha determinado las festividades y los actos públicos a lo largo de su historia, estableciendo ciertas costumbres y prácticas que, remontando sus orígenes a un pasado lejano, han permanecido hasta nuestros días.
Tal observación viene a propósito de la fotografía que publicamos en este nuevo número, la cual recoge un instante de la procesión de San Antonio de Padua celebrada en Aranda en los años cincuenta del siglo anterior, a su paso por la plaza Mayor.
No estaría de más recordar quien fue el Santo cuya imagen porta la susodicha procesión. Aunque su sobrenombre evoca una ciudad del norte de Italia –Padua–, Antonio de Padua nació en Lisboa en 1195. Este fraile franciscano viajó mucho, viviendo primero en Portugal y después en Francia e Italia. Famoso predicador, llegó a atraer a grandes multitudes, lo que le obligó a llevar a cabo su prédica al aire libre, pues los templos se quedaban pequeños para albergar a la muchedumbre que acudía a escuchar sus enseñanzas.
Volviendo a la fotografía, es interesante señalar que en la época en que ésta fue tomada, la procesión de San Antonio de Padua arrancaba de la Iglesia de San Juan Bautista. Hoy lo hace desde la de Santa María, y reúne unos cien cofrades, varones y mujeres. Es costumbre de la Junta de turno, que se renueva anualmente, repartir el día de la fiesta un panete entre los cofrades.
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